Manuela, Rocío y Fabio han sido detenidos. Héctor no ha atendido las súplicas de la pequeña Paloma, que le rogaba no dejarle sin su verdadera madre. El policía es consciente del gran vínculo que se ha creado entre ellas. Ya en comisaría, Yolanda pide ver a su hija una última vez, Alba rechaza a su madre biológica con una mirada cargada de culpa, no solo le ha separado de la que considera su verdadera madre, sino que ahora pasará a cargo de asuntos sociales, a la espera de una familia interesada en su adopción. Pero Yolanda está decidida a recuperarla, con Manuela en prisión, ahora es su oportunidad… Mientras, Rocío hace un intento de responsabilizarse y cargarse de todos los cargos, ¿pero sufre un grave desmayo que le deja en parada cardiaca… conseguirá sobrevivir? Lucho muestra un gran arrepentimiento con su primo Ramón, para que le permita volver a su casa, no tiene dinero y no puede dejarle tirado.